28/07/2008
Vitoria-Gasteiz,
28 de julio de 2008.- La Catedral de Santa María ampliará
el próximo 4 de agosto su exitoso programa de visitas ‘Abierto por
obras’. Desde esa fecha, será posible subir a la torre y disfrutar
desde esta atalaya situada a unos 30 metros de altura de unas
impresionantes vistas de la ciudad y la Llanada. Durante los
meses de agosto y septiembre esta visita será gratuita.
Las obras de restauración de la torre, iniciadas a comienzos de año
avanzan a buen ritmo, lo que ha permitido incluir este espacio en el
programa de visitas guiadas. A partir del 4 de agosto el montacargas
que actualmente se emplea para subir los materiales de obra permitirá a
los visitantes ascender hasta este punto para comprobar el desarrollo
de los trabajos a la vez que se disfruta del paisaje.
La ascensión a la torre se realizará en el montacargas de obra, por lo
que por el momento sólo se podrá ofrecer a los visitantes durante los
fines de semana y los días festivos. El montacargas ha sido
acondicionado y cuenta con todas las medidas de prevención exigidas
para garantizar la seguridad de los visitantes, que irán acompañados en
todo momento por guías y personal de la Fundación. Cada grupo estará
formado por un máximo de diez personas . Habrá visitas cada hora y
tendrá una duración aproximada de cuarenta minutos.
A partir del mes de octubre el precio de esta visita será el mismo que
el del recorrido guiado por el interior del templo, 5 euros.
Desarrollo de
las obras
La torre de la Catedral de
Santa María se está se está restaurando de arriba a abajo. Tiene cuatro
elementos diferenciados: el arco de entrada (ya restaurado), el cuerpo
cuadrado, el cuerpo octogonal, que incluye las campanas y el reloj, y
el chapitel.
Actualmente se está trabajando en el chapitel y en el cuerpo octogonal.
Con un plazo de ejecución de doce meses y un presupuesto cercano a 1,2
millones de euros, se pretende resolver de manera definitiva la
consolidación de todo el remate superior que permita quitar todo el
andamiaje. La espectacularidad de la torre es además una de las mejores
manifestaciones de la filosofía del proyecto, por su superación de
barreras arquitectónicas, la incorporación de espacios expositivos,
usos turísticos, culturales, históricos y, en general, por la
incorporación del uso civil a un espacio religioso.
En la restauración del cuerpo octogonal y el chapitel se está
manteniendo el criterio de mantener la mayor cantidad de elementos que
estén en funcionamiento, reparar los que tengan algún problema y
sustituir los que no se puedan reparar. Así, se ha renovado la
instalación del pararrayos y el remate del chapitel, y se va a
sustituir toda la pizarra del tejado. Se han reforzado además todas las
estructuras del chapitel, muy dañadas por el empuje del viento, las
vibraciones de las campanas y el incendio que sufrió la torre en el
siglo XVIII.
Asimismo, todas las campanas, excepto la situada en el chapitel, fueron
bajadas hace poco más de un mes para ser sometidas a un estudio
exhaustivo antes de ser reparadas. Además, se han abierto algunos
huecos que estaban cegados con idea de añadir en el futuro un
carrillón. Y con respecto al reloj, se ha bajado la maquinaria para su
reparación y se van a sustituir las esferas de metacrilato colocadas en
los años 60 por unas vidrieras realizadas con técnica tradicional,
probablemente como las que hubo en su origen.
Atalaya de la ciudad
Se pretende que la torre sea la atalaya de la ciudad, el punto
culminante de la visita a los trabajos de restauración de la catedral.
De ahí que esté previsto que a largo plazo se pueda ascender a través
de un ascensor interior, colocado en el hueco que ocupaban las pesas
del reloj, hasta la plataforma de las campanas e incluso hasta el
reloj, situado en un nivel superior.
Está previsto que la fase de recuperación del cuerpo octogonal y el
chapitel esté finalizada a comienzos de 2009.