08/06/2011
Vitoria-Gasteiz, 8 de junio de 2011.- El cantón de Santa María se abre al público tras más de diez años cerrado al finalizar la colocación de dos ascensores con los que se da un gran paso en el objetivo de mejorar la accesibilidad del templo. Estos dos elevadores permitirán que cualquier persona pueda ya recorrer el interior de la Catedral a través de las pasarelas y, en menos de un año, subir a la torre.
La obra ha sido inaugurada hoy por el diputado general de Álava en funciones y presidente del Patronato de la Fundación Catedral Santa María, Xabier Agirre, el alcalde en funciones, Patxi Lazcoz, y el delegado del gobierno, Mikel Cabieces. Ha tenido un coste de 480.000 euros y ha sido promovida por el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz con la financiación del Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad Local a través de la Agencia para la Revitalización Integral de la Ciudad Histórica (ARICH). El proyecto y la dirección de la obra han corrido a cargo de la Fundación Catedral Santa María en coordinación con los técnicos de la ARICH. A partir de este momento, el Cantón de Santa María entre las calles Chiquita y Fray Zacarías Martínez será una vía peatonal.
Con la instalación de estos dos ascensores se resuelve uno de los problemas más difíciles que se presentan en casi todas las catedrales medievales, el de dar accesibilidad a los espacios situados a cierta altura respecto de los niveles del propio templo y de las calles adyacentes. En este caso, se ha resuelto mediante la construcción de dos torres de ascensor con distintas alturas y funcionalidades situadas en el patio norte de la Catedral y a las que se accede desde el cantón de Santa María.
El proyecto se enmarca dentro del plan global de restauración de la Catedral, uno de cuyos objetivos principales es hacer visitable y accesible en la medida de lo posible el mayor número de espacios. Además, con esta intervención se comienza a mejorar la accesibilidad del conjunto, al dejarse preparado el sistema de comunicaciones en espacios en los que aún no se ha actuado.
Las pasarelas y la torre, accesibles para todo el mundo
Con estas dos torres se conseguirá comunicar los espacios arqueológicos situados bajo el piso de la Catedral con el nivel del templo y, más arriba, con una sala que se situará sobre el pórtico y desde la que se ascenderá por el interior de la torre hasta el campanario, convertido de este modo en una atalaya sobre la ciudad accesible para toda la ciudadanía.
La primera de ellas, situada en el lado del patio más cercano a la cabecera de la Catedral y la calle Chiquita, comunicará en el futuro los sótanos arqueológicos con el nivel del templo. De este modo, permitirá la visita continua de ambos espacios una vez que se termine la recuperación del suelo. Hasta que llegue ese momento, este ascensor dará acceso a las personas con movilidad reducida desde el cantón de Santa María a la pasarela del interior de la nave. Hasta este momento, las personas en sillas de ruedas o con movilidad reducida no tenían posibilidad de visitar la catedral a través de las pasarelas.
De 8 metros de altura, esta torre tiene forma cilíndrica rematada en un pequeño cono y está construida con grandes sillares de arenisca de la sierra de Urbión (Burgos). Está rodeada de una escalera volada realizada también con cantería de piedra caliza de Marquina (Vizcaya). El ascensor de su interior tiene capacidad para ocho personas.
En el otro lado del patio, junto al fondo del pórtico de la Catedral, se sitúa la segunda torre. Comunicará el nivel del cantón con el de la Catedral y ambos con el de la futura sala sobre el pórtico, desde la que se ascenderá hasta la torre por una escalera y ascensor interiores, ahora en construcción y que está previsto finalicen en 2012. Por el momento permite el acceso a la parte ya recuperada de la Catedral. Con una altura de 18,7 metros, esta torre ha sido construida con también con grandes sillares de piedra arenisca dorada de la sierra de Urbión. En su interior alberga un ascensor accesible de ocho plazas que tiene tres paradas: en el nivel del cantón, en el de la Catedral y sobre el pórtico.
En total, en la obra se han empleado unas 365 toneladas de piedra arenisca y 40 de piedra caliza.